Después un largo esperar nuestra economía empieza a prosperar tras el DIKTAC impuesto tras la gran guerra, los salarios cada vez son más abundantes y la mendicidad de las calles menos prominente. Pero entre nosotros siguen habiendo un problema ellos los que no son de ningún  sitio pero de todos, los que nos arrebatan los negocios cada vez más rápido ¿Por qué no son ellos los hombres lamentables de nuestras calles? Y si son nuestros maridos, padres o inclusive hijos que desgracia la nuestra. Recuerda si ves a algún ciudadano con este símbolo no son de fiar cruza a la acera de enfrente o denuncia a la SA para que no tengas que volver a cruzarte con él o ella otra vez .